Fue en la habitación de una vivienda del barrio Peñi Trapún. Cuatro jóvenes dormían cuando la pared de adobe comenzó a ceder y aplastó a uno de ellos que, de milagro, resultó ileso.
Se trata de una construcción dividida en distintas dependencias, donde residen tres familias, en calle San Luis al 700. Según comentaron la pared que cayó es de una habitación donde dormían cuatro jóvenes y comenzó a ceder alrededor de las 8; tres de ellos lograron refugiarse pero el último quedó debajo de los escombros de pared y techo, aunque solo fue golpeado en un pie sin lesiones graves.
El resto de la dependencia quedó con algunas grietas que hace peligrar a la estructura del inmueble, construida mayormente de adobe. Los residentes apuntalaron algunas partes y colocaron nylon durante el día de ayer para evitar que las complicaciones sean mayores.
Poco después del mediodía de hoy, promotores de Desarrollo Social y Bomberos acudieron para auxiliar a las más de 15 personas que viven allí.