En los concursos de acreedores que presentaron las dos empresas hay una deuda millonaria con el Ente Autárquico Intermunicipal. El presidente Miguel Schvartzbaum presentó un posible plan de pago que los acreedores deben aceptar.
El ENIM es uno de los acreedores privilegiados junto con el IADEP, la AFIP y dos bancos. No figuran en esa lista selecta los trabajadores, que no cobraron sus indemnizaciones porque los montos que se les adeuda son mucho menores.
Las empresas no están en quiebra e incluso se menciona que hay interesados en comprarla, pero son todas especulaciones. Lo cierto es que el ente, ante la jueza Marta Cirulli, del Juzgado que sigue el caso en Buenos Aires, consiguió que se le reconocieran 46 millones de pesos en deuda de capital y 80 millones de intereses. La primera cifra está entre los privilegiados y la segunda no.
Este dinero se entregó en cinco créditos diferentes, que incluyen los que tomó Rasha en su momento para la construcción de una estación de servicios y la planta. Este último no lo terminó de pagar y pasó a Schvartzbaum cuando adquirió la firma.
Hay otra deuda del empresario con el ente, pero involucra a otra empresa que adquirió Neuform, una empresa que también está en el parque industrial y que funcionó poco tiempo. El empresario Margulis la había construido para producir resinas y enviar el producto a Chile, pero cuando el precio del producto disminuyó no pudo continuar operándola.