Lo hizo con la ayuda de los bomberos voluntarios de esa ciudad que dispusieron de una de las unidades para que se pueda desplazar.
La salida fue desde el cuartel y desde allí, inició su periplo por las diferentes barriadas de Plaza Huincul, donde los chicos que escuchaban desde lejos las bocinas, salieron a saludarlo.
El personaje navideño, ataviado con su clásico traje rojo y blanco, regaló sonrisas y golosinas a los pequeños que con toda ilusión, esperaban poder saludarlo. (Video de gentileza)