Esta tarde ardió el zanjón debajo del puente de Eguinoa y horas antes un descampado en barrio Norte. Las altas temperaturas tienen a mal traer a los bomberos de las dos ciudades que en la última semana tuvieron más de 20 intervenciones.
Si bien el 2016 fue un año con mayor número y registro de precipitaciones que los anteriores, la temperatura de verano recuerda el clima desértico de la comarca petrolera que, por estas épocas, suele padecer incendios difíciles de controlar principalmente en espacios abiertos donde se acumulan pastizales secos o basura.
En la mayoría de los casos el calor ayuda a la propagación del fuego por varios metros, como lo fue el canal colector esta tarde, debajo del puente de Eguinoa. Una superficie de casi 50 metros quedó dañada por el paso del fuego que no generó pérdidas materiales, pero si encendió el alerta de vecinos por la cortina de humo que llegó a las casas de la zona y que dificultó la vista sobre el puente.
Horas antes, en barrio Norte de Plaza Huincul bomberos de esa ciudad acudieron a una quema de pastizales similar en una zona descampada.
Entre los dos cuarteles contabilizaron un promedio de 20 intervenciones en incendios de estas características, por lo que recomiendan extremar las precauciones en lugares donde se acumulen los deshechos tales como podos, pastizales y yuyos.