El episodio de violencia ocurrió a las 7 del domingo en la avenida Pedro Rotter y Cánepa del barrio Uno de Plaza Huincul.
Desde la policía se informó que a esa hora, una vecina llamó para solicitar ayuda porque una familiar, también una mujer de 32 años, se encontraba en estado de ebriedad y la insultaba. Luego, paso de los insultos a la acción y le rompió un vidrio de una ventana y otro de un vehículo.
Cuando llegó la patrulla, los uniformados intentaron calmarla, pero no quiso e incluso se había lesionado por la propia rotura de los vidrios. Los efectivos finalmente, la redujeron y la llevaron, en principio, a la guardia del hospital local para ser atendida y luego se puso a disposición del Juzgado de Faltas, porque se le labró una sanción por la contravención.