Tras incendiar la casa de su ex pareja y sus hijos en diciembre, José Baeza fue sometido a una instancia judicial pero las partes optaron por la suspensión del juicio a prueba.
El hombre no se presentó a la audiencia de hoy pero llegó minutos después y se trenzó en una fuerte discusión fuera del edificio con los familiares de la víctima.
El pasado 30 de enero Andrea y sus hijos perdieron todas sus pertenencias en un voraz incendio que se desató en su vivienda de Villa El Puestero. La mujer y sus hijos no se encontraban en el lugar porque un día antes su ex pareja la había amenazado con quemar el hogar y esta fue una de las tantas situaciones de violencia que experimentaban desde mayo del año pasado.
“Le dieron 10 días de preventiva y esos días los pasé en una carpa con mis hijos, después pude techar la parte de la casa que no se quemó y estuve ahí 15 días sin luz. Por problemas familiares yo dejé ese terreno y estoy construyendo mi casa con la ayuda de mis hermanos porque él no nos ayudó en nada, ni para comprarle cosas a los hijos” contó la víctima.
En la mañana del jueves fue la audiencia de suspensión de juicio a prueba y Baeza no se presentó a horario, por lo que el encuentro fue reprogramado para el próximo 6 de marzo, pero la resolución sería dar un año de rehabilitación con tratamientos psicológicos por “buena conducta”, no obstante al llegar al edificio judicial el hombre se topó con los familiares de su ex pareja y protagonizó una fuerte discusión que motivó en la intervención de los uniformados de guardia, aunque el episodio no pasó de algunas agresiones verbales cruzadas.
Andrea recordó que el planteo de la defensa es que no existen testigos que certifiquen que Baeza fue quien incendió su hogar y que “existe una restricción de acercamiento hacia mí, pero no hacia los chicos” y remarcó que “mis tres hijos son los únicos testigos de la violencia que vivimos”.