Es un joven de 19 años que recibió el disparo mientras caminaba por la avenida Perniseck, aproximadamente a la altura del 700.
La víctima pidió ayuda como pudo, tras recibir el impacto, y consiguió que los vecinos que pasaban por allí pidieran una ambulancia. Ocurrió al mediodía del domingo.
Una vez en el hospital se corroboró que era un disparo, que el proyectil ingresó por el pecho y salió, por lo que no se sabe con qué arma lo hirieron. Las lesiones son graves y por eso el informe médico asegura que está en estado reservado.
El joven mantuvo contacto con la policía pero no quiso aportar datos sobre las circunstancias que rodearon a la agresión, postura que toman habitualmente aquellas personas que pertenecen al ambiente delictivo o que son víctimas de personas que viven de la delincuencia, y no quiere denunciar por temor a nuevas represalias.