Los hermanos Yamila y José Bravo son jugadores de Barderas Insurrectas y este último también es entrenador. Los dos hablaron de los desafíos del Roller Derby en la región y de la importancia de los torneos como el que organizó el equipo.
José contó que tuvieron dos jornadas muy buenas de Roller Derby, “tuvimos días re copados, los equipos se sintieron cómodos, cumplimos con los horarios y lo importante es que todos se sientan cómodos y que el Roller Derby se integre más, con esto dimos un paso más para eso”.
Yamila (Pantera 678) dijo que el Valletano fue positivo para todos ya que el nivel fue alto, “vas subiendo de categoría a medida de que vas jugando, nos pareció importante hacerlo categoría B porque ya jugamos otros torneos y los ganamos, por eso nos pareció indicado invitar a equipos de mayor jerarquía para poder aprender de ellos”.
José que además de jugador del equipo masculino, es entrenador del femenino, dijo que con los entrenamientos se ven avances, pero más se ven en la pista en este tipo de encuentros, “se vio un cambio que se ve a diario, pero se ve más reflejado en este tipo de eventos donde se pone la carne al asador y se ve si lo que uno hace en el entrenamiento tiene efecto. En Barderas se vio un cambio muy zarpado en este torneo”.
Yamila dijo que es complicado armar un torneo como el Valletano III en el que llegaron equipos de diferentes puntos del país y también dos de jerarquía de Chile, “es complicado conseguir lugar, encargarse de muchas cosas. Por suerte pudimos hacer tres torneos y estamos felices porque los equipos vienen y se siente bien”.
José adelantó que para Barderas se vendrá un tiempo de análisis de lo que dejó el Valletano y buscar otros objetivos, “tenemos que cerrar que nos dejó el Valletano, que cosas positivas y que cosas negativas. Las positivas dejarlas y les negativas modificarlas”.