Con la segunda parte del proyecto en marcha, Cutral Co aportaría los fondos para el mini reactor y Huincul pediría el aporte del Instituto de Juegos de Azar de Neuquén (IJAN) para adquirir más ingresos, pero los estudiantes de ingeniería que diseñaron la iniciativa del Cracking Térmico de plásticos pidieron no ser excluidos de las negociaciones y supervisar cada paso.
Gabriela Shell y Daiana Lizarrondo, parte del proyecto que busca generar combustible a partir del reciclaje de plásticos, explicaron que “el proyecto se encuentra en la segunda etapa” y para eso fue diseñado un reactor de pequeñas dimensiones que es una de las partes principales para la puesta en marcha, pero para completar la instancia también es necesaria la obtención de cromatógrafo, para luego proceder con el diseño industrial para el funcionamiento de una planta de producción.
En ese sentido contaron que el municipio de Cutral Co inició las gestiones para financiar el mini reactor, al tiempo que el Concejo Deliberante de Plaza Huincul declaró el proyecto de interés Municipal, Educativo, Científico y Cultural, como herramienta para solicitar un aporte económico al IJAN para cubrir la etapa. “Nosotros estamos más que agradecidos, pero creemos necesario ser parte de las negociaciones y presentar nuestra parte técnica” y brindar asesoramiento respecto a las cifras estimativas para solventar todos los gastos.
Los futuros ingenieros remarcaron que es un proyecto para crear una forma de vida a futuro con una cultura de reciclaje que traerá de la mano energía, fuentes de trabajo y una reducción al impacto ambiental.