Desde la medianoche las ráfagas ingresan a gran velocidad desde el noroeste y en las primeras horas de la mañana la intensidad ya superó los 100 kilómetros por hora. Hay árboles caídos, chapas desprendidas de los techos y otros inconvenientes en la comarca.
Según los datos oficiales del aeropuerto local, a las 9 de la mañana el viento tenía una velocidad constante de 73 kilómetros por hora con ráfagas cercanas a los 90 km/h y se espera que sobre el mediodia pueda empeorar. Ademas de la intensidad, la comarca se ve afectada por las nubes de tierra que generan una disminución en la visibilidad.
Por otra parte se supo que Defensa Civil tuvo que asistir a varias familias, ya que en distintos sectores de la ciudad hubo voladuras de techos y caídas de árboles, pero también cortes de energía e inconvenientes con semáforos y cartelería en la zona del centro.
Se estima que las fuertes ráfagas persistirán al menos hasta el mediodía o primeras horas de la tarde.