El cirujano que fue denunciado por su expareja y madre de su niño como maltratador, da su versión de la historia.
En diálogo con este medio, el cirujano indicó que “me duele en el alma porque es una mentira. Agustina (Hermosilla) dice que yo la golpeé en varias oportunidades, incluso estando embarazada. Nunca pero nunca hubo una denuncia de ese tipo por parte de ella ni de nadie en mi contra. Eso sería terrible. Eso es falso, mentiroso y malicioso”.
La joven había denunciado que el padre del niño rompió la restricción de acercamiento. “En realidad, tenemos la prohibición de acercamiento mutua. Ella también la rompió”, aclaró.
Por otra parte, recordó que su expareja debió dejar la casa que compartieron cuando vivían juntos el 30 de diciembreo del año pasado. “Tenía que buscar la casa y yo me hacía cargo del alquiler, el mes de depósito y adelanto todo, porque ella vive con mi hijo. Pero la casa (donde está ahora) es mía, desde antes que fuéramos pareja. Ahí está también mi consultorio”, señaló.
Sin embargo, eso no se cumplió, tal como refirió. El plazo se prorrogó hasta el 30 de junio. “En junio tenía tiempo de buscar otra propiedad y si no cumplía iba a ser desalojada porque no corresponde. Otra vez no cumplió y empezó a hablar con María Esther Ragni, que le llenó la cabeza y le dijo que iban a hacer que no la desalojen. Me vienen extorsionando hace tres meses, con que van a salir a hablar barbaridades mías”, concluyó.
Finalmente, subrayó que “no hay violencia, no ejercí violencia, no soy violento, no le pegué a ninguna mujer embarazada”. Y agregó que tiene todas las denuncias judiciales realizadas.