Tras el triste episodio de ayer la familia de barrio Progreso fue asistida por Desarrollo Social para su traslado a una hostería que le permita dar un resguardo a los niños. “Por ahora se costeará un alquiler y vamos a analizar la entrega de materiales para que puedan volver a construir” explicó la secretaria Jesica Rioseco.
El temporal de fuertes vientos dejó una lista casi interminable de daños en la comarca petrolera, pero entre los casos más graves estuvo la voladura total de la casa de la familia Serna en horas de la mañana. La casilla de madera no soportó las ráfagas y salió despedida por los aires pocos segundos después de que los padres y sus tres niños de 2, 4 y 5 años lograran evacuarse. Después de algunas horas en que familiares y otros vecinos brindaron una mano, “fueron asistidos y trasladados a la hostería Mapuche hasta que puedan encontrar un alquiler donde quedarse y el municipio pueda gestionar su vivienda” señaló la subsecretaria Rioseco y aclaró que una de las posibilidades es “entregar materiales, ya que la señora nos explicó que su esposo puede construir”.
En el lugar aún quedan algunas pertenencias que de a poco son retiradas y los padres de la familia aprovecharán que los pequeños quedaron a resguardo para volver a cerrar su predio en calle Benazar y poder reconstruir el hogar.