Se trata de los trabajadores de la empresa Quintana, les dijeron que en octubre deben ser tres en vez de cuatro en “boca de pozo” y se resisten.
La empresa trabaja para YPF, en diferentes áreas, pero el conflicto se generó en un área no convencional donde debe aplicarse el nuevo convenio colectivo de trabajo, que incluye un descenso en la cantidad de trabajadores por turno. El diario Río Negro informa que los operarios de Quintana decidieron paralizar las actividades, desde la semana pasada, en dos equipos que la petrolera nacional utiliza para el proyecto Lajas de gas no convencional. El ministerio de Trabajo dictó la conciliación y si bien Guillermo Pereyra pidió acatar, los trabajadores resolvieron mantener el reclamo.
La confrontación podría extenderse a la actividad de otras empresas del sector como DLS y Nabors.