Una de las vecinas que vive en la calle Zapala se quejó porque el asfalto “está destruido por las sucesivas pérdidas de agua que negligentemente el municipio dejó que se perpetuaran en el tiempo” y consideró que ahora “la calle está intransitable”.
Los vecinos presentaron una nota para que se arregle la calle y “el resultado es una montaña de ladrillos huecos rotos que nivelaron con una máquina del municipio, el polvillo de los ladrillos desintegrados por el tránsito lo tenemos adentro de nuestras casas y el problema sigue igual, más sucio nomás”.