Es por el operativo del grupo “Albatros” que se hizo en la zona de Villa Mascardi, y que terminó con el asesinato del joven mapuche Rafael Nahuel, además de herir a otras personas.
Desde el FN se repudió además las etiquetas sociales. “Rafita” como se lo conocía tenía la clara conciencia de la lucha territorial que se está dando en la Argentina, pero no era un “militante mapuche”, era solo un joven de 22 años que estaba acompañando a familiares que habían sido desalojados la semana pasada.
Según se indicó, hasta su muerte era un “invisible”, una historia de pobreza más, ahora que fue asesinado queriendo justificar su muerte lo tildan de “militante mapuche” como si fuera un delito ser mapuche.
En el comunicado, se expresa que “no fue un enfrentamiento. Fue un asesinato. La familia de Rafael Nahuel y él se defendieron con palos y piedras”. Por otra parte, se
repudió la profundización de la grieta social. “Ellos también son argentinos. Todos nos merecemos tener y gozar de los mismos derechos en este suelo nacional”, refirieron.
“Tenemos que seguir luchando para evitar que se sigan avasallando los derechos de los argentinos. Ser pobre, ser mapuche, ser originario no nos transforma en menos argentinos, no existen en nuestra Constitución Nacional categorías de habitantes o ciudadanos”, indicaron. Finalmente, expresaron que “vivimos en una democracia señor Presidente, Mauricio Macri, no en una autocracia”.