El ducto había salido de sistema anoche, debido a las condiciones climáticas según se anunció desde el propio organismo provincial, Epas. Esta mañana, volvió a ponerse en funcionamiento.
Ante las inclemencias climáticas -tormentas eléctricas- se resolvió detener la operación y el bombeo desde este sistema de provisión de agua, que se denomina San Isidro Labrador.
En cambio, sí se enviaba el líquido potable desde el río Neuquén, a través de la meseta Buena Esperanza.
Hoy, ya se normalizó la provisión del servicio desde el lago Los Barreales.