Según el servicio del EPAS, la turbidez del río llegó a 27 mil BTU en la madrugada pero ahora está en 3500. “Parece que lo peor ya pasó”, dijo un operario.
La turbidez es la cantidad de residuos que trae el agua, tanto tierra como ramas y piedras. Cuando mayor es el nivel de turbidez más difícil es potabilizar el agua. Ayer debieron parar la planta pero hoy se retomó el trabajo y habría suministro.
La razón por la cual había muchos sólidos en el agua es por una tormenta que cayó a la altura de Buta Ranquil, en la zona de río arriba. Igualmente se advirtió que los niveles de turbidez son cambiantes así que podría modificarse a lo largo del día.