La victoria del viernes ante Sol de Mayo ratificó el enorme presente de Pérfora, que se ve en un nivel superlativo respecto a sus últimas versiones y tiene una idea de juego clara y efectiva. Pero todo lo bueno que se ve en cancha, se opaca por la cruda realidad económica. Hay aportes que no llegan al club y pagar los sueldos es un desafío.
Por Piero Di Lena.- Resulta difícil creer que Pérfora no disfruta el presente con los resultados obtenidos en el Torneo Federal. El Verde se asentó hace tiempo en la tercera categoría del básquet argentino y en su séptima temporada parece decidido a dar el gran salto. Sin embargo “no se puede disfrutar completo porque vivimos de esto y no estamos cobrando” comentó Fernando Claris en diálogo con 299Deportes tras la victoria del último viernes frente a Sol de Mayo. La realidad es que los clubes del interior se miden año a año con la falta de grandes sponsors que los obliga a recurrir a las instituciones públicas.
La Provincia es la principal proveedora de los clubes que militan en torneos federales, y pese a que la secretaría de Deportes fijó el compromiso de dar aportes mensuales a los clubes neuquinos de fútbol y básquet (entre otras disciplinas), las fechas no se respetan. Semanas atrás algunas instituciones como Petrolero e Independiente alzaron la voz, pero no fue suficiente. Pérfora es uno de los más perjudicados, ya que desde que la temporada se puso en marcha no recibió un peso y afrontar algunos costos representa un desafío.
Pese a contar con sueldos atrasados, el cuerpo técnico y los jugadores decidieron seguir y redoblar el esfuerzo. “Hay una entrega ajena a la realidad que vivimos” opinó Fernando Claris, que remarcó “la concentración y el sacrificio del equipo son propios de un playoffs, se transmite el compromiso en la cancha y también en la semana en cada entrenamiento”.
Tal vez, por ser tercera división pagan el precio de ser vistos como amateurs, pese a que los jugadores son profesionales y el club cumple con los requisitos que da la liga. Claris apeló a la autocrítica y sostuvo que “en el seno del club nos acostumbramos de alguna manera al Federal y eso lleva a que se vea así, pero para nosotros es un sacrificio más en lograr la identidad de los jugadores que se suman y el sentimiento de los que son del club y defienden estos colores. Se valora y se siente mucho más desde afuera”, aunque “el éxito es efímero, estamos orgullosos de representar a la ciudad y a la provincia, yo no me olvido de que la selección campeona de Neuquén tuvo a jugadores nacidos y criados acá”.
Por ahora el equipo no baja los brazos y aguarda por los duelos de la próxima semana. El Verde responde con resultados a la mirada indiferente de las autoridades provinciales que, otra vez, miran primero a la capital y esperan para observar la realidad del interior neuquino.