Con un buen marco de público se desarrolló el espectáculo del ilusionista y mentalista, Tusam.
Al comenzar con su exposición TUSAM, un silencio abrumador reinó en el lugar, al explicar que se encontraba conectado a energía eléctrica y a transformadores que elevaban la tensión, iniciando luego fuego en antorchas que se encontraban con combustible, con sólo rozarlas con su mano o lengua. Concluido el primer acto, invitó a subir al escenario a un grupo de hombres y de mujeres. Con los primeros ejecutó distintas pruebas, mostrando cómo se transmitía la electricidad entre ellos, encendiendo lámparas y tubos de luz. En el caso de las mujeres, repitió el acto inicial en el que al rozar se iniciaba fuego. Luego el asombro llegó de la mano de un hombre hipnotizado que se acostó sobre clavos, sin sufrir lesión alguna.
El intendente José Rioseco, subió al escenario para hacerle entrega de un presente con el Monolito Fundacional de Cutral Co y manifestó que el objetivo perseguido por la Gestión Rioseco, era ofrecerle algo diferente a la comunidad, en la que el vecino que quisiese, pudiese participar y formar parte del espectáculo. Por su parte el hipnotizador agradeció al jefe comunal, la especial atención que le brindó, la cordialidad con la que fue recibido y “el tener contacto con la gente” como si se encontrase en su casa.
Después del momento ceremonial, realizó una hipnosis masiva a más de 32 personas en el escenario, las que reflejaban con los movimientos de su cuerpo, las distintas experiencias que iba narrando y que les hacia vivir. Como acto de cierre, hipnotizó al Mandatario Municipal, con el cual llevó a cabo un acto de fuerza, que impresionó a todo el público presente.
Al finalizar, TUSAM expresó su satisfacción con el espectáculo brindado, “yo la pasé genial y espero que el público también”. Manifestó que había superado las expectativas con las que había venido a Cutral Co y que se iba muy contento, esperando el mismo sentimiento en los vecinos que concurrieron al Gimnasio Municipal “Enrique Mosconi” para pasar una velada diferente.