El hombre que vendía drogas en la calle Belgrano es de Mendoza y se llama Carlos Ponce Orozco. Desde Godoy Cruz aseguran que allá también vendía droga y que se tuvo que ir por enfrentamientos con otros “vendedores”.
Ponce Orozco tiene causas federales y también provinciales, estas últimas por portación ilegal de arma. Cuando se lo iba a juzgar recibió tres disparos que lo dejaron al borde de la muerte y en terapia intensiva. Pero sobrevivió y sólo un mes después de la balacera volvió a la venta de drogas.
Ocurre que el 2018 no mejora para él porque primero encontraron a un adolescente con 378 mil pesos y droga para vender. El chico sería sobrino de Ponce y por ello oficiaba de “mula”. Y luego cayó la policía federal cuando tenía más mercadería y 100 mil pesos en efectivo.
En Mendoza
Para los detectives de la zona donde vivía en Mendoza, quienes fueron consultados por El Sol, se trata de un hombre que se marchó de la provincia porque estaba enfrentado con algunas bandas o rivales y “no podía avanzar en su negocio”.
No descartan que haya “querido empezar de cero” después de varias pisadas en comisarías locales. No es la primera vez que cae por temas relacionados al narcomenudeo –así lo marcan sus antecedentes– y esto le jugó en contra cuando nació la última investigación en su contra. Si bien se instaló en Cutral Co, su familia –tanto la madre como sus hermanos– continúan viviendo en Godoy Cruz.
A los pesquisas mendocinos no les llamó la atención que Ponce Orozco fuera baleado, detenido con cocaína y marihuana y deba responder en el banquillo por tener de un arma de grueso calibre ilegalmente. “Se trata de un hombre conflictivo, ligado al mundo delictivo. Estos personajes no saben hacer otra cosa”, detalló un detective. Y no está tan errado: la Policía Federal neuquina confirmó en su investigación que ni él ni su mujer, que también fue capturada en el reciente procedimiento, tenían trabajo.
Con información de El Sol