El precio de la harina se disparó nuevamente y en el país se anuncian grandes aumentos en el kilo de pan.
Sin embargo uno de los principales proveedores en la comarca contó que se esfuerzan por mantenerlo sin cambios.
“Somos optimistas en que esto va a pasar, esto es cíclico. Tuvimos varios vaivenes, hoy estamos navegando en aguas turbulentas y estamos a la espera de que se apacigüe” sostuvo Alberto Tobares de las panaderías Mundial y Alvear, que abastecen con pan a varios comercios locales.
“Estamos muy atrasados con el precio del pan respecto a otras localidades, los panaderos entregamos el kilo a 30 pesos en los comercios y en otras ciudades como Zapala o Neuquén está a 40 o 35 como muy barato”. En el almacén del barrio sale $38 pesos el kilo mientras que en provincias como Buenos Aires, informaron que el kilo podría llegar a costar $80.
Tobares explicó que el precio de la harina sufrió un aumento del 70 u 80% desde marzo a la fecha, “hoy pagamos una bolsa de harina a 700 pesos” dijo y remarcó que “es un producto que se cotiza en dólares y cuando ven la posibilidad lo exportan, pero cuando hay sobre stock vuelve a bajar”, por eso apuntan a sostener la crisis.
Sin embargo, el aumento conlleva una baja en el consumo porque “el pan es un producto muy sensible al bolsillo de la gente y aumentarlo es golpear a la clase media baja. Las familias de más recursos también consumen pan, pero tienen otras alternativas con el pan integral, de salvado, galletas de arroz y otras variantes contra la bolsa de pan que una familia promedio compra en el almacén del barrio”. En ese sentido, Tobares señaló que desde fines del 2017 a la actualidad, la producción diaria se redujo en 4 o 5 bolsas, es decir, entre 240 y 300 kilos.
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“No estamos trabajando a pérdida, pero sí sin rentabilidad” analizó y agregó “al bajar el volumen de elaboración y venta, el precio costo se aumenta porque queremos conservar los puestos de trabajo y mantener la infraestructura. Si esto sigue así, nos vamos a ver obligados a aumentar el precio, pero por ahora tratamos de mantenerlo”.
En marzo, la bolsa de 50 kilos de harina tenía un valor de $390 y ahora ronda en los $700. Alberto contó que en sus 40 años de experiencia en el rubro afrontó al menos una crisis económica por década y remarcó su optimismo en conseguir que los precios vuelvan a bajar.