Roberto Rapazzo Cesio se lamentó por el desenlace del partido y dijo “tenemos que cuidar está sede porque es la única de la Patagonia”.
Cutral Co hizo un esfuerzo extra para darle la posibilidad de jugar en la zona al equipo rionegrino, pero al verse en desventaja en el partido por 16avos de final, la parcialidad Albinegra incendió la cabecera norte, atacó a los bomberos y arrojó piedras al campo de juego. Todo provocó que el partido se suspendiera a los 80 minutos de juego.
Disturbios en la popular de Cipolletti
“El partido no merecía terminar así por el esfuerzo que hizo el intendente Rioseco para que Cipolletti juegue acá” declaró Rapazzo Cesio luego del partido y agregó “el resultado es lógico por la diferencia entre un equipo del Nacional B y uno del Federal A“.
La cabecera contaba con la presencia de unos 4 mil hinchas y, entre ellos, las barras La 69 y La Banda del Tigre, antagónicas entre si, pero que se unieron en los disturbios. “Es muy triste Que no se valore el esfuerzo que se hizo para que vinieran a presenciar el encuentro“.
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Cipolletti no sólo signó su despedida de la Copa Argentina 2018, sino que además quedó expuesto a sanciones por los incidentes. Hubo bomberos golpeados, policías apedreados y otros espectadores que también recibieron piedras que llegaban desde fuera del estadio luego de la desconcentración de la tribuna.
“Hay que respetar y cuidar esta sede porque es la única de de la Patagonia. Desde Cipolletti haremos todo lo posible para que Cutral Co mantenga esta cancha con un campo de juego digno del fútbol”.