Este lunes, la comunidad educativa volvió a las aulas una vez que se concluyeron los trabajos de reparación que se concretaron.
El director, Julio Navarrete, explicó que “se cambiaron en total, cuatro equipos de calefacción por dos equipos nuevos con un poco más de calorías y seguridad”.
Pero para la instalación nueva, se debieron hacer algunas tareas más como por ejemplo, adaptar las tuberías existentes a los equipos nuevos y comprobar si el caudal de gas era suficiente para ello, según describió.
“Al cambiar los equipos con mayor cantidad de calorías, necesitan más caudal y había que verificar que las cañerías eran las adecuadas. Eso es lo que se vino haciendo. Hubo modificaciones y también adecuar todo como lo pide las inspecciones de Camuzzi Gas del Sur”, sostuvo.
Si bien el lunes hubo algunos inconvenientes con los equipos, hoy ya estaban en funcionamiento adecuado.
Mientras no hubo clases, los profesores se reunieron para modificar las planificaciones. “Se hicieron los reajustes correspondientes que después los volcarán a la tarea de cada día y también se realizaron trabajos prácticos de revisión y los alumnos debieron entregarlos”, mencionó Navarrete.
De ahora en más, esperan que lo que resta del año, la actividad sea normal, aunque siempre están a la expectativa ante cualquier imprevisto.
El edificio que alberga una matrícula superior a los 500 estudiantes, tiene todavía algunas cuestiones edilicias pendientes. “Falta el baño para discapacitados que no tenemos, tenemos que cambiar a inodoros, una ampliación que solicitamos y tomaron las medidas pero no se presentó la empresa a hacer la obra todavía”, manifestó Navarrete.