El hombre llegó a una mueblería junto a un niño pequeño como un cliente más. Pidió pasar al baño y se retiró rápido. Más tarde, pasó por una carnicería del barrio Centenario y una forrajería del Otaño, donde hizo compras con unas tarjetas de crédito.
Ocurrió el viernes por la tarde en el local Dulce Hogar de calle Sáenz Peña de Cutral Co. Según contó la dueña, el baño está al fondo del salón y sólo lo usan los empleados, pero en ese momento había varios clientes y el autor aprovechó la distracción para entrar, revisar una cartera que encontró en el lugar y llevarse una billetera.
La dueña del local no se dió cuenta sino hasta la noche, cuando cerró su local y fue al baño en busca de su cartera. En la billetera había 3 mil pesos, tarjetas de crédito y débito y dos documentos de identidad, uno de ellos de una menor de edad.
Al recordar que el hombre pasó al baño, optó por revisar los movimientos de su tarjeta y así supo que las utilizaron para pagar en una carnicería del barrio Centenario y una forrajería del Otaño, con un corto lapso de tiempo entre si. Ambos comerciantes fueron consultados y reconocieron al joven y al niño con las mismas características de los que estuvieron en la mueblería.
El caso fue denunciado en Comisaría 14° y buscan al responsable, que todavía no fue identificado.
