L.P. contó que en su corta experiencia en el hospital Zonal de Cutral Co y Plaza Huincul tuvo que atravesar varios episodios que la llevaron a una crisis personal. Esta semana decidió judicializar su caso que fue caratulado como mobbing o acoso laboral.
La denuncia se radicó en el Juzgado Laboral con el acompañamiento de la doctora Ángela Castillo y María Esther Ragni, representante del Consejo Municipal de la Mujer de Plaza Huincul, que explicó “desde enero a la fecha tenemos más de 700 denuncias por violencia contra las mujeres y exigimos la presencia de más profesionales psicólogos en Salud Pública para atender estos casos” remarcó Ragni.
“A las 2 semanas empezaron los maltratos, la jefa de salud mental me gritaba todos los días, se reía y me humillaba. Cuestionaba lo que hacía y lo que no hacía exponiéndome delante de los demás” contó y relató que “no tuve la preparación correcta cuando ingresé, porque no hubo un periodo de adaptación, sino que me mandaron a los tumbos a ver como era el trabajo y encima que te degraden, que te humillen y te amenacen con tu continuidad laboral es insoportable”.
Según relató, “el maltrato es constante, hasta me acusaron de robar cosas y tanto estrés y ensañamiento me llevó a fallar en mi trabajo y no poder cumplir con los pacientes”.
Desde hace algunas semanas recibió una licencia psicológica que la mantiene al margen de su puesto laboral en el hospital, pero teme que pueda perder su puesto en un futuro.
“Me vine sin nada de Roca y no tengo a nadie, pero no quiero perder mi trabajo porque tengo muchos proyectos, entre ellos un voluntariado para asistir a pacientes oncológicos que ya me aprobó la dirección del hospital” contó.