Mónica Segovia, una vecina del barrio Uno, protestó en la banca del pueblo por la cantidad de infracciones recibidas por tener materiales de construcción sobre su vereda.
“La ordenanza no se aplica adecuadamente y no hay educación al vecino sobre esto, solamente se busca recaudar” explicó Segovia ante los concejales de la ciudad, sobre el cierre de su presentación.
La primera sanción que le aplicaron fue por la permanencia de materiales de la construcción sobre su vereda; luego llegó una segunda por materiales y basura, aunque “no era basura lo que había, sino que no quedaba más lugar en el patio para guardar materiales y herramientas de los albañiles”.
Por esas infracciones, abona un plan de 5 cuotas de $974; pero tiempo después llegó una tercera multa.
Esta vez por arrojar bolsas de basura al bulevar. “A esta última me resisto, porque no me pertenecen. Nunca arrojamos nuestra basura a la calle“.
Segovia apuntó que desde el Juzgado de Faltas no dieron lugar a su descargo y manifestó “no sé si es acoso o encono contra nosotros“.
Finalmente, la vecina recomendó a los concejales que revisen la ordenanza para evitar que otros vecinos padezcan una situación similar.
El recamo fue ingresado al recito para su revisión y comunicación al Ejecutivo y al Juzgado de Faltas de Plaza Huincul.