Este domingo, en la casa de la Historia, un grupo de tejedoras que asiste al taller de Manualidades Expres, a cargo de la profesora Juanita Molina, entregó un centenar de gorros a la Fundación SENO.
El taller funciona en la sede del barrio Pueblo Nuevo y de Centro Sur. La idea surgió a través de la mamá de Agustín Contreras Ocare, quien transmitió a las alumnas del taller la necesidad de colaborar de manera solidaria cos gorros tejidos de lana o hilo a las niñas y niños que deben afrontar el tratamiento contra el cáncer.
“La vemos muy emocionada (a Mónica Ocare, mamá de Agustín) pero son los golpes que nos fortalecen y siempre despiertan en nuestra comunidad un abrazo de solidaridad y es el sentido y la interpretación que le dieron los talleristas”, dijo el intendente José Rioseco, quien visitó la exposición y muestra.
“El hecho de querer estar y acompañar, por lo general solemos estar en los buenos momentos pero es mucho más importante si estamos acompañando en los momentos difíciles”, subrayó.
Fueron cien gorritos los que lograron tejer con la colaboración de otras manos solidarias que también se sumaron a la iniciativa.