Se desarrollaron charlas teóricas y trabajos grupales en las que apuntó al desarrollo de una sexualidad no solamente relacionada a la reproducción.
Al comenzar la jornada, Soledad Soberón, referente del programa provincial de Salud Sexual y Reproductiva, expresó que “la consejería es el pilar de la Salud Sexual y Reproductiva, porque garantiza y otorga derechos sexuales y reproductivos” y mencionó que “el programa aborda ejes de diversidad sexual, distribución de DIU e implantes, y fertilidad”.
Las consejerías son un espacio de asesoramiento personalizado, de encuentro entre integrantes del equipo de Salud y las personas usuarias del sistema; se generan en un ámbito privado, donde la intimidad y la confidencialidad son principios fundamentales. El objetivo es fortalecer la autonomía para la toma de decisiones –en este caso sobre salud sexual y salud reproductiva– de manera libre, consciente e informada.
Las temáticas que pueden abordarse en las Consejerías son sumamente diversas, entre ellas: sexualidad y placer, relaciones de género y posibilidades de elegir cómo vivir la sexualidad incluida la orientación sexual, negociación del uso de preservativos, derechos sexuales y derechos reproductivos, uso de métodos anticonceptivos, prevención de abortos inseguros y causales de acceso a la interrupción legal del embarazo, modificaciones corporales relacionadas con la identidad de género, prevención de infecciones de transmisión sexual en relación con las prácticas sexuales, situaciones de vulnerabilidad y violencia.
La capacitación teórica–práctica se realizó el viernes 16 de agosto en el auditorio del Edificio de Salud del Centro Administrativo Ministerial (CAM), y contó con la participación de agentes de los efectores públicos de Rincón de los Sauces, Loncopué, Cutral Co, Neuquén capital, Piedra del Águila, Aluminé, Senillosa, Plottier y Las Lajas.
