La salud sexual es un estado de bienestar físico, mental y social en relación con la sexualidad, y no solamente la ausencia de enfermedad, disfunción o malestar.
Soledad Soberón, referente del programa de Salud Sexual en Neuquen afirmó que para que la salud sexual “se logre y se mantenga, los derechos sexuales de todas las personas deben ser respetados, protegidos y ejercidos a plenitud” y recuerda la Declaración Universal de los Derechos Sexuales.
Derechos contemplados
Desde el ministerio de Salud se destacó que los derechos contemplados son:
– Derecho a la igualdad y a la no discriminación. Nadie debe sufrir discriminación por el modo en que vive su sexualidad, lo que incluye la total libertad para elegir pareja, expresar la propia sexualidad y vivir libremente su orientación sexual.
– Derecho a la libertad y la seguridad, y el derecho a decidir sobre la propia vida sexual. Toda persona es libre de decidir sobre su vida sexual, así como toda persona es libre de negarse a una relación sexual y ese derecho debe respetarse. Asimismo, no se debe forzar a una mujer a interrumpir su embarazo o a quedarse embarazada, sin que pueda ser sometida a una intervención, si no ha sido informada adecuadamente y ha mostrado su consentimiento. Se debe garantizar el acceso a la información sobre la salud sexual y reproductiva en cualquier momento y circunstancia.
– Derecho a la información y a la educación de la infancia, la adolescencia y la juventud. Toda persona tiene derecho al acceso a la educación y a la información no sexista y libre de estereotipos en cuanto concierne a su salud, sus derechos y sus responsabilidades en materia de sexualidad y reproducción. La información debe ser presentada de manera objetiva, crítica y pluralista.
– Derecho a no ser sometido a torturas ni maltrato. Es un derecho universal la protección frente a la violencia, los abusos y la explotación sexual. Ninguna persona debe ser maltratada o discriminada por razón de su sexo, religión, etc. Así, la violencia machista, el maltrato sexual y psicológico, las violaciones y los abusos, la mutilación genital, el infanticidio femenino, la discriminación o infravaloración por razón del sexo, la privación o disminución de libertad por razón del sexo, la desigualdad de oportunidades entre sexos, etcétera, son violaciones de los derechos humanos.
Sobre el lema 2019
Este año, se destaca la importancia de la educación integral de la sexualidad o como se acostumbra llamar: Educación Sexual Integral o ESI. El objetivo es resaltar que todas las personas de todas las edades deben tener acceso a la educación en sexualidad.
“La ESI debe ser apropiada a la edad, científicamente correcta, culturalmente competente y basada en los derechos humanos, la igualdad de género y con un enfoque positivo de la sexualidad y el placer”, indicó Soberón y enfatizó que “el Día Mundial de la Salud Sexual tiene como intención difundir los derechos sexuales que todas las personas tienen, independientemente de su edad, religión, sexo, orientación y/o identidad sexual”.