Ocurrió el domingo por la madrugada en barrio Nehuen Che. El herido fue baleado con un arma calibre 38, pero ninguno de los impactos representó riesgo de vida.
El comisario inspector Eduardo Quintuman narró que el incidente se dio ayer por la mañana, pasadas las 7.40, en una vivienda del barrio Nehuen Che. “Fue un problema de índole familiar, donde una persona le efectuó dos disparos de arma de fuego a su hermano”, contó.
Los impactos fueron en el muslo y la cadera, sobre la cresta ilíaca, de la pierna izquierda. Por las heridas fue atendido en el hospital de Complejidad VI y recuperó el alta poco después.
“Las lesiones serían compatibles con un arma de fuego de calibre 38 y presentaban solo orificio de entrada” apuntó Quintuman, aunque aclaró no tener conocimientos sobre la intervención médica del lesionado.
El uniformado señaló además que el hermano agresor fue demorado y puesto a disposición de la justicia. “Más tarde se lo notificó de la causa y quedó en libertad” indicó.
Además, realizaron un allanamiento en la vivienda para buscar el arma de fuego, pero no lograron hallarla.