El fin de año no fue tranquilo para el municipio de Plaza Huincul, que decidió otorgar un bono extra a personas sin trabajo y terminó con cubiertas prendidas y agresiones. Todo hace pensar que generadas más por el clientelismo político que por la necesidad económica.
Con la lección aprendida, el intendente Gustavo Suárez busca sostener el rumbo que tomó en septiembre de 2019. El objetivo para junio, cuando debe pagar el próximo aguinaldo, “es llegar más acomodados”, sostuvo el jefe comunal.
Ello implica necesariamente poner orden en relación al gasto corriente. La gestión de Juan Carlos Giannattasio finalizó con una deuda de 180 millones, que contrasta mucho con el superávit de Cutral Co, a cargo de José Rioseco.
“Parte de esa deuda es histórica”, dice políticamente Suárez. Y admite que espera poder sanearla en su gestión pero aclara que no se puede detener la inversión. “Hay obras que no demandan mucho y que deben hacerse si o si. También es cuestión de planificar”, aclara.
Su plan estratégico ya fue presentado ante sus funcionarios pero será publico para la sociedad en marzo de este año, cuando hable en el Concejo Deliberante.