Un hombre de Plottier encontró el primero cerca de San Patricio, lo llevó a su casa como adorno y luego lo entregó a la policía que logró su destrucción ayer. El segundo apareció en un yacimiento a pocos kilómetros de Centenario y fue entregado a las autoridades.
Los hallazgos sorprendieron a la región, pese a que se encuentran inactivos, se trata de artefactos atípicos. Los especialistas los describieron como proyectiles de morteros militares, aunque su antigüedad y procedencia todavía son desconocidos.
El pasado lunes un hombre de Plottier se presentó en la comisaría 7° de su ciudad denunciando el hallazgo de un explosivo. Lo encontró en la zona conocida como “El Coirón”, cercana a San Patricio del Chañar, en estado de abandono y desgastada. Pese al potencial peligro, lo cargó en su vehículo y lo llevó hasta su casa, donde fue retirado por bomberos y peritos especializados en explosivos.
Finalmente fue llevado ayer hasta el kilómetro 32 de ruta 8, donde procedieron a la detonación del explosivo en una zona descampada, apartada y segura.
Sin embargo, otro explosivo fue denunciado ayer en el cuartel de bomberos de Centenario, por un trabajador petrolero que lo encontró en una zona de yacimientos.
Según publicó el sitio Centenario Digital, este artefacto sería un proyectil de cañón de 105 milímetros de calibre que también estaba inactivo y quedó a disposición de la comisaría 5° de la ciudad.