Ragni se reunió con el jefe de la fuerza pública, Julio Peralta, preocupada por el cierre de la oficina de atención a la violencia de género, que funciona en Plaza Huincul.
En la misma reunión aprovechó para consultar por el caso ocurrido a principio de año. El 3 de enero aparecieron los restos mortales de una mujer de unos 65 años.
A un mes, no hay información sobre su identidad y las circunstancias en las que murió.
Según informaron, la mujer tenía entre 55 y 65 años, 1,45 metros de altura y un peso de entre 40 a 45 kilos. Además, su color de piel es clara intermedia, cabellos largos negros con canas, nariz, boca y orejas pequeños, separación entre los incisivos superiores.
“Vamos a seguir el caso de cerca, no queremos que no haya Justicia para esta mujer porque pudo ser víctima de un femicidio”, detalló Ragni.