“Ayer hubo una jornada y se decidió no comenzar las actividades hasta que el petitorio se asegure y que llegue a la escuela”, explicó el director de la EPET Nº 10, Silvio Campos.
El lunes, a las 18 es la reunión con las familias de los estudiantes para informarles sobre la situación.
El petitorio es extenso pero tiene que ver con una serie de demandas que año tras año plantean las autoridades de la escuela. Entre ellas, la necesidad de ampliación del taller; la creación de cargos para el área taller; la falta de auxiliares de servicio –en el caso del turno vespertino no hay ninguno-.
“El taller quedó chico desde su creación. Ya era insuficiente. La población de alumnos creció en 2º y 3º años y hay talleres que cuando se tienen que juntar no dan abasto. Los talleres-aulas son pequeños no pueden tener a 28 o 30 chicos y hay normas de seguridad que no se cumplen”, especificó.
Se solicita además un container para guardar el material de depósito el que está adentro de las aulas.
El aumento sostenido de la matrícula es desde hace varios años. En primer año hay siete divisiones y en segundo, son seis. Luego hay tres cuartos y “están amontonados”, describió.
La matrícula general es de 780 alumnos y este año habrá 188 ingresantes sin contar a los estudiantes repetidores que de todos modos tienen garantizado su lugar.
“Es producto de varios años que se viene pidiendo ampliaciones y se una escuela nueva que necesita las dos ciudades”, subrayó.