El pliego para el cargo de Defensor de los Derechos del Niño, la Niña y Adolescentes de la II Circunscripción Judicial salió de comisión y pasó al recinto de la cámara de diputados neuquinos, con el postulante Lautaro Arévalo.
En la comisión de Legislación de Asuntos Constitucionales y Justicia emitió despacho para elevar al pleno de la Cámara.
Durante la entrevista que la comisión ‘A’ realizó a los candidatos elevados por el Consejo de la Magistratura de la provincia del Neuquén para que la Legislatura preste acuerdo legislativo como establece el artículo 27 de la Ley 2533.
Miembros de la comisión ‘A’ entrevistaron a Lautaro Juan Arévalo, quien resultara segundo en el orden de mérito del concurso Nº 166 del Consejo de la Magistratura de la provincia del Neuquén, y que fuera elevado a esta Legislatura para su acuerdo. Esto ocurrió luego de que el pliego de quien saliera en primer lugar, Andrea Espinosa no logró los votos necesarios para su designación en la sesión de agosto pasado.
Arévalo, quien salió segundo, hizo un repaso de su formación y su desempeño como profesional liberal, y explicó que desde hace dos años se desempeña como funcionario de la Defensoría de Ejecución del interior donde pudo valorar el trabajo que se hace desde el Centro Educativo Provincial Integral (CEPI) dentro de las cárceles.
“El trabajo que se hace desde el CEPI es el que realmente transforma y repara porque brinda herramientas reales y tangibles para devolver a los sujetos a la sociedad con la posibilidad de tener otras oportunidades”.
Respecto de la ley 2302 de Protección de Niños, Niñas y Adolescentes opinó que “fue revolucionaria cuando se sancionó y significó un cambio de paradigma al que todo el aparato judicial tuvo que reacomodarse” y opinó que estos cambios requieren de una Defensoría que trabaje ‘fuera de la oficina’ en conjunto con las instituciones intermedias y de forma articulada con Educación y con la sociedad.
“La comunicación entre todos los actores es fundamental y será eficaz si tenemos mensajes correctos y una mirada unificada hacia el problema. Por eso la Defensoría no puede estar detrás de un escritorio, tiene que hacer trabajo de campo y desde ahí entender la realidad y compartir los mensajes”, concluyó.
Al ser consultado por la edad de imputabilidad se manifestó en contra de cualquier intento por bajar la edad y opinó que “el camino de la ley penal no es el que puede ayudarnos. No hay que bajar los brazos, sería un fracaso porque hay un montón de alternativas y herramientas que se pueden usar antes de bajar la edad de imputabilidad”, dijo.
En ese sentido, mencionó que “educación, artes y deporte son ejes fundamentales para que alguien tenga un proyecto de vida que esté en armonía con el resto de la sociedad”.
Sobre el proyecto que crea el observatorio de abuso sexual infantil, Arévalo consideró que “así como está, el proyecto no supera un control de convencionalidad y no podría ser aplicado porque el artículo 2º tiene términos vagos que hay que especificar tomando los recaudos y estableciendo límites para no identificar a las víctimas y vulnerar sus derechos”.
“Fuera de eso, se trata de una herramienta útil para dirigir políticas de forma más específica para evitar o tratar estos delitos”, dijo.
Luego de ser consultado por su opinión sobre educación como servicio esencial, las garantías de conectividad para la educación, la Ley de identidad de género, y la problemática social de la circunscripción judicial en la que se desempeñaría, el diputado Andrés Peressini (Siempre) adelantó su voto negativo al pliego “porque yo voté a la otra candidata (Andrea Cecilia Espinosa) que tenía 15% más de puntaje que Arévalo y que fue rechazada por la Cámara”. “Entiendo que cuando uno vota a favor de un candidato, vota por el mejor”, concluyó.
En igual sentido se expresó Leticia Estéves (JxC), quien invitó a escuchar el examen oral de Arévalo donde “la jurada técnico que hizo la mayoría de las preguntas lo puntuó con 10 sobre 20, lo que significa que sed sacó un 5”.
Desde el mismo bloque, César Gass consideró que “es grande la distancia entre una entrevista y otra. Arévalo fue incoherente en su exposición mientras que Espinosa fue sólida” y señaló que la diferencia en el puntaje se ve en las exposiciones.
En tanto su par, Karina Montecinos (JxC) agregó que “tiene debilidad en conceptos sobre la baja de imputabilidad y tiene errores al entender la ley de identidad de género como la que sólo permite cambiar la identidad de género de las personas”.
Por su parte, Carlos Coggiola (PDC) rechazó el pliego advirtiendo que no comparte que se envíe al 2º en el orden de mérito “porque puede degenerarse y permitir el ingreso del 7º, 8º o 9º y pierde sentido un concurso que busca garantizar la excelencia”.
Soledad Martínez (FdT) señaló que “el Consejo de la Magistratura tiene su propio reglamento para los concursos y se está trabajando dentro de los marcos de la legalidad” y adelantó su voto positivo para el pase al recinto. En igual sentido, su compañero de bloque, Sergio Fernández Novoa adelantó su acompañamiento y coincidió en que “debe enviarse al 2º cuando el 1º es rechazado”.
El presidente de la comisión ‘A’, Maximiliano Caparroz (MPN) recordó que este concurso se hizo dos veces porque el primero quedó desierto y consideró que el pliego “debe pasar al recinto para que sea el pleno de la Cámara quien vote para brindar su acuerdo o no”.
El despacho con el pliego de Arévalo consiguió la aprobación por mayoría con el acompañamiento de las diputadas y diputados Maximiliano Caparroz, María Laura du Plessis, Ludmila Gaitán, Sergio Fernández Novoa, Soledad Martínez, Darío Peralta, Fernando Gallia, Francisco Rols y Carlos Sánchez. Por la negativo se inclinaron César Gass, Karina Montecinos, Carlos Coggiola y Andrés Peressini.