El conocido folclorista local, Ricardo “Mono” Cortéz, regresó a su casa. Después de muchas semanas en terapia intensiva, la enfermedad le dejó secuelas que deberá superar en los próximos meses.
Su familia dio muestras de agradecimiento por todas las palabras de apoyo y cariño recibidas durante todo este último tiempo.
Cortez tiene por delante una recuperación larga, ya que las secuelas que deja el virus COVID-19 son severas en determinados pacientes.
En todas las semanas que luchó contra el virus estuvo internado en el Sanatorio Huincul, recibió la atención médica necesaria para poder recuperarse.