A lo largo de una extensa exposición de defensa, el fiscal Terán reconoció errores y dio a conocer detalles de su vida íntima para explicar lo que pasó.
El fiscal jefe pidió que les apliquen 45 días de suspensión para poder jubilarse, tras admitir que cometió errores en sus declaraciones mediáticas. Y en su defensa apeló a la filosofía griega para explicar que era “él y sus circunstancias”.
Entre sus múltiples confesiones, Terán aseguró que vivió una vida de alcoholismo en su niñez y juventud. “En mi familia hubo mucho alcohol, mi primer coma alcóholico fue a los 5 años, el segundo fue a los 14 años”, confesó.
Y aseguró que era un mal estudiante, no por dificultades de aprendizaje sino porque se aburría. “Hasta que ingresé a la Iglesia Adventista del Séptimo Día (Mormona) era un sujeto complicado, pendenciero, peleador, el piña va, piña viene era la costumbre, cambié en la iglesia”, contó, pero después tuvo que dejarla porque defendió a una niña que fue expulsada por usar aros.
También confesó que hace 7 meses no habla con su hija mayor que es militante de Mulala. Y que su actual esposa tiene una grave enfermedad y que tiene que cuidar a sus dos hijos de 5 años.
En cuanto a su decisión de hablar con los medios sobre la violencia de género, Teran admitió que estuvo mal. “No encontraba manera de controlar mi verborragia, no podía dejar de disparar mi opinión, que soy enfático y enérgico ya se sabe por los juicios de los que fui parte pero cuando uno ya transmite a la sociedad, y se comunica a través del mismo tiene que tener estilo, yo lo perdí por lejos”, admitió.
También contó que habló con su jefe, el fiscal José Gerez, quien le pidió que guardara las formas. Pero aún así no se calló.
Al parecer Terán no cambió de opinión, consideró que lo que estuvo mal fueron las formas pero no el fondo.
Aún así le reconoció a Lucila Trujillo haber declarado “bien” en su contra. Y consideró que antes de esta polémica, la Fiscalía “hacía la plancha” respecto de la aplicación de la ley Micaela y que ahora se abrieron espacios para la formación y el debate.