Se llevó adelante la negociación del bono extraordinario de fin de año por 50 mil pesos que reclama el sindicato petrolero y las empresas. Sin embargo, no hubo avances y se reanudará mañana el diálogo.
Desde el gremio que dirige Guillermo Pereyra, se describió que el encuentro entre el Sindicato de Petroleros Privado de Río Negro, Neuquén y la Pampa, y las Cámaras de empresas operadoras (CEPH) y de Servicios (CEOPE) pasó a un cuarto intermedio hasta este miércoles 6 de enero a las 11 horas.
Se indicó que no hubo acercamiento de las partes. “Parece que acá es más importante resolver problemas de las empresas que ya tienen garantizados subsidios y eliminación de retenciones para exportar, entre otras medidas de estímulo y quedan de lado los trabajadores que este año padecieron una situación extremadamente compleja en materia salarial”, dijo Pereyra al terminar el encuentro.
Pereyra recordó que durante la cuarentena se aplicó “a mansalva y de manera absolutamente irregular” el artículo 223 bis de Ley de Contratos de Trabajo. “No se cumplió con la ley y se puso en riesgo a los trabajadores que en muchos casos debieron cumplir multiplicidad de tareas con reducción salarial y no tuvieron aportes ni contribuciones. De hecho no hubo aguinaldo debido a la aplicación del 223 bis”. Y agregó que “ningún trabajador firmó ese artículo en los términos que se había acordado, e incluso sufrieron amenazas para seguir prestando tareas”.
Esta situación fue reiteradamente denunciada por la organización sindical ante las autoridades competentes y en los ámbitos correspondientes, se especificó. Pero, ante “una nueva afrenta y constante desidia de parte de las empresas, el Sindicato de Petroleros Privados vuelve a ponerse de pie y en estado de movilización para evitar estos atropellos que se cometen de manera velada e impune”.