Mientras los vecinos de la avenida del sur de Plaza Huincul esperan por el asfalto, la secretaría de Obras y Servicios Públicos realizó montículos de tierra en ambos márgenes para que los vehículos reduzcan la velocidad.
“Se colocaron los badenes para frenar un poco esa pista de carreras que es la avenida. A pedido de los vecinos, se llegó al acuerdo para colocar estos reductores hasta que se asfalte” indicó Juan Carlos Leiva, secretario de Obras y Servicios Públicos de Huincul. Al respecto, el funcionario recordó el vuelco fatal del 18 de enero pasado y otros tantos siniestros viales en Benito Pérez como consecuencia de la alta velocidad.
Leiva sostuvo que “para el intendente es una prioridad asfaltar la avenida”, pero mientras aguardan por la obra, buscan otras alternativas para mejorar el tránsito. En ese sentido, remarcó que los reductores de tierra fueron acordados con vecinos de la zona que se ven afectados no solo por los potenciales siniestros viales, sino también por el polvillo que los vehículos generan al levantar velocidad.
Para eso fue que, previo a creación de las lomadas, la secretaría retiró la capa de ladrillo molido colocada para evitar baches en épocas de lluvia.
En total, se colocaron 14 lomadas entre los dos márgenes, con una distancia de 200 metros entre si. De la mano, colocaron cartelería indicativa para asegurar que se respete la velocidad máxima establecida de 40 kilómetros por hora.