Un llamado telefónico alertó al personal de la comisaría sobre la presencia de una persona en los techos de la parte trasera del complejo policial, sobre la zona del patio de los internos. El “mensajero” no fue identificado, pero si hallaron el paquete arrojado al predio.
Ocurrió durante el mediodía el sábado pasado en la comisaría 15 del barrio Pampa. Según fuentes policiales, esta modalidad no es nueva, pero si cuesta detectarla a tiempo. Una o más personas arrojan elementos desde el exterior para proveer a los presos, generalmente, de drogas.
Según se supo, una persona trepó un paredón de la parte posterior del predio sobre la calle Maestros Neuquinos y arrojó un bulto al patio. Los policías salieron de la comisaría a buscarlo, pero no lo encontraron. Sin embargo, ordenaron una requisa inmediata de los internos.
“Hay 8 internos y se los sacó de sus celdas para revisarlos uno por uno”, relató el comisario mayor Eduardo Bravo. Fue durante esa requisa que uno de ellos entregó de forma voluntaria un envoltorio con marihuana, aunque no precisaron la cantidad.
El interno en cuestión cumple con una condena por tenencia de armas, resistencia a la autoridad y daños. Por este motivo solicitaron la apertura de una nueva causa judicial por la ley 24660.