Se trata de una persona que estaba empleada en una empresa constructora y que debía cumplir con tareas laborales.
En el ingreso al Complejo Industrial Plaza Huincul, de YPF, se instaló un detector de metales que es monitoreado por la policía provincial y por una empresa de seguridad.
En uno de esos controles de rutina, detectaron un arma de fuego en poder del trabajador. Era una pistola 9 milímetros, considerada un arma de alto poder de fuego porque es grueso calibre.
Al producirse el hecho, se radicó una denuncia y se demoró al hombre, que fue trasladado hasta la comisaría 6 donde se inició una causa judicial y luego recuperó la libertad.