Hace 45 años que el matrimonio tiene su casa en barrio Centenario. Compraron un camión que alquilan al municipio de Huincul para mantener un ingreso en la casa, pero constantemente son blanco de ataques anónimos que les impiden trabajar.
Se trata de la familia que posee el camión regador que este año ya sufrió el robo de la batería y también del cristal del parabrisas. Este fin de semana “nos levantamos para salir y encontramos el vidrio del conductor roto”, lamentó la dueña.
La mujer reprochó “los dejamos afuera de casa, en la esquina de Suipacha y Mariano Modeno porque no podemos entrarlos. Otros vecinos también dejan sus vehículos afuera, pero solo nos atacan a nosotros. No entendemos por qué siempre a nosotros”, cuestionó enojada y angustiada.
El camión regador no es el único. La semana pasada su camioneta particular también fue violentada y les robaron la batería. “Hicimos denuncias por todos los casos, pero no pasa nada. No sabemos qué es lo que pasa con nosotros”, insistió.
Actualmente, los vehículos están fuera de servicio y la familia ve limitada su posibilidad de trabajar por los constantes ataques.