Dos nuevos focos se sumaron este miércoles a las 1.300 hectáreas afectadas por el incendio en el lote 39 de Quillén, en jurisdicción de Aluminé. Se desataron en Rucha Choroi y Abra Ancha, pero fueron rápidamente contenidos por los brigadistas.
En la madrugada de ayer se había controlado un foco en Ruca Choroi, pero con el transcurso de la jornada se activó uno en la misma zona y otro en Abra Ancha; distante a unos 100 kilómetros de Aluminé, donde está la forestación principal de Corfone.
Según informaron las autoridades locales; el apoyo y la intervención de la gente de las comunidades cercanas a Ruca Choroi y los brigadistas fue determinante para controlarlos casi de inmediato y evitar su propagación.
En el caso de Abra Ancha -un espacio con mejor accesibilidad- los brigadistas actuaron con el soporte de helicópteros para contener el fuego.
El intendente de Aluminé, Gabriel Álamo, explicó que “en el lote 39, el foco principal, la situación es complicada. Hoy tenemos unas 1.300 hectáreas afectadas“. Si bien esperan que algunas áreas no hayan sido dañadas o quemadas; los daños son muy altos.
El origen del incendio fue la caída de rayos en la zona el pasado jueves; durante un periodo de tormenta. “Se siguen redoblando los esfuerzos. Está trabajando Manejo del Fuego de la provincia, brigadistas de Corfone, gente del sistema nacional de manejo del fuego, gente de parques nacionales y bomberos. Son unas 150 personas, hoy se esperaban brigadistas de Córdoba y de San Luis”, agregó el intendente de Aluminé.
El clima no dio alivio hasta el momento; ayer hubo viento fuerte en la zona y hoy se espera un día soleado y seco con máximas de 30º.
