Sacrificio, constancia. Tierra y viento. Falta de agua y frío o calor. La historia del petróleo en Neuquén está marcada por la tarea titánica de esos hombres y mujeres que llegaron para explotar el recurso natural que es el petróleo.
La historia dice que se identificó el lugar sobre la base del trabajo del geólogo Juan Keidel. Él aconsejó en 1914 a la Dirección General de Minas, Geología e Hidrología que se realizaran perforaciones en Plaza Huincul, entre las estaciones de Challaco y Ramón Castro del Ferrocarril del Sud que se extendía de Neuquén a Zapala. Sugirió realizar la primera perforación un kilómetro al norte del Km 1.295 y “en el alto de un morro, al lado de una mata verde”.
En septiembre de 1915 la repartición oficial ordenó el traslado a Plaza Huincul de una perforadora Fauck, a la que se bautizó con el nombre de “Patria”. Se trataba de un equipo a percusión accionado a vapor con una torre de madera, cuya capacidad de perforación era de 500 metros.
La perforación del Pozo Nº 1 comenzó el 17 de febrero de 1916. Estuvo a cargo del ingeniero Enrique Cánepa, de la Dirección General de Minas, Geología e Hidrología de la Nación.
Al alcanzarse los 327 metros, el 18 de agosto de 1917, reinaba el pesimismo y la Dirección de Minas pensaba seriamente en levantar el campamento. Fue entonces que Cipriano Salto y Juan Soufal, entre otros trabajadores, se acercaron al pozo con un farol a kerosene para revisar una empaquetadura. De pronto se produjo una explosión, el farol se apagó y quedó una llamita azul alrededor del pozo que fue rápidamente apagada. Había gas en el pozo. Volvían las esperanzas y se redoblaban los esfuerzos.
Al llegar a los 516 metros aparecieron rastros de petróleo. Cánepa consiguió fondos, se multiplicó el personal y el 29 de octubre de 1918 la máquina alcanzó el horizonte petrolífero, entre los 603 y los 606 metros.
Aseguran que Cánepa y su equipo siguió a pesar de las indicaciones de parar y el éxito marcó la historia de Neuquén para siempre.
Ese sacrificio marcaría también la idiosincracia de la familia petrolera, sacrificio y rebeldía. Desde Plaza Huincul se iría hacia Cutral Co después y ahora también se refleja en las comunidades de Rincón de los Sauces y Añelo.
Estaba prevista una celebración para hoy pero se suspendió por la alerta de viento.