Una idea, el amor por un ídolo y por el fútbol, y los maravillosos puentes que suele tender la tecnología entre las personas, arrojaron un resultado perfecto: Liliana, la improvisada fotógrafa que captó a Carlos cuando tenía 14 años junto a Diego Maradona en Mar del Plata pudo reencontrarse con él de manera virtual y prometerle que le hará llegar la foto, esa que ella tomó, pero que siente que no le pertenece.
La historia nació hace pocas horas, de la mano de Laura, la hija de Liliana, que es de Plaza Huincul, pero ahora vive en Buenos Aires. La joven le hizo llegar a la página de Instagram “Proyecto Pelusa” una foto donde se ve a un adolescente sonriendo junto a Diego Maradona, que se asoma por la ventanilla de un auto.
La idea era contactar a Liliana con ese chico, para regalarle la foto, esa que él pidió por favor que le tomaran en el breve instante en que su ídolo posó junto a él en Mar del Plata, a la salida de un hotel, en 1981.
El sitio de Instagram publicó el tema y le pidió a sus más de 76.000 seguidores que compartieran la historia para encontrar a ese chico, que supuestamente era de Rosario. Gracias a esos cruces de comunicación que permiten las redes sociales, uno de los administradores logró dar con Carlos, quien podría ser aquel adolescente.
Hoy, en un video en vivo que Proyecto Pelusa gestionó, y que fue seguido por más de 200 personas, los protagonistas se reunieron en una pantalla, se conocieron y compartieron con alegría los pormenores de la historia que rodeó el instante en que ambos se encontraron con el astro del fútbol.
De ellos se puede contar que Liliana Garrido es de Plaza Huincul y hoy vive en Buenos Aires, aunque gran parte de su familia sigue aquí; que las fotos de esas vacaciones que ella tomó cuando tenía 19 años son un tesoro que alimenta los momentos familiares, y que siente que la de Carlos junto a Diego no le pertenece, por eso quiere regalársela.
Y de Carlos Gear se puede decir que en realidad no es de Rosario, sino de Los Toldos (provincia de Buenos Aires), que hoy tiene 55 años y vive en Jericoacoara, en el nordeste de Brasil, donde tiene un restaurante.
“Siempre tenía esa imagen de la foto que me saqué (con Maradona) y que no tenía”, contó en el video en vivo, donde no dejó de agradecer a Liliana por haberla guardado.
La historia a la que no le faltó la emoción y el entusiasmo del administrador de “Proyecto Pelusa” estuvo atravesada además por la noticia de la muerte de otro ídolo de fútbol, en este caso brasileño: “Pelé” cuyo deceso se conoció esta tarde.