Como estaba previsto, se desarrolló un encuentro de motoqueros para celebrar los 21 años de los Hijos del Viento, la agrupación de fanáticos de las motos.
Durante el viernes llegaron todos los participantes, muchos de ellos de Chile y otros desde distintos puntos de la Argentina. Hubo música, bandas en vivo, baile, tragos y mucha confraternidad.
Desde la dirección de Turismo del municipio se realizó un recorrido por el Parque de la Ciudad para reflejar lo que allí se vivía y difundieron el momento en el que una motociclista recibía un parche nuevo para su campera.
En el mundo de los motoqueros, entregar un parche significa ser familia, es decir que forman parte de la misma hermandad. Se realiza únicamente cuando la persona que entrega el parche y la persona que la recepciona se compromenten a ese vínculo de familia en la ruta. Entonces “cuando ocurre la magia” hay lágrimas y mucha emoción.
Tras dos días sin descanso, Sandro Botron explicó a este medio que fueron más de 500 las motos que ingresaron y que salió todo bien.
