Con un aumento de casos a nivel nacional de faringitis aguda, con 17 decesos en lo que va del año, se renovaron los consejos sanitarios para afrontar la enfermedad y evitar que desarrolle su forma más grave. Consultar al médico en forma rápida y no automedicarse, para que se pueda determinar si se está frente a un caso bacteriano, es el principal consejo médico ante esta dolencia, que se encuentra atravesando su etapa estacional.
En el reporte del Ministerio de Salud de la Nación, se evaluó que en lo que va del 2023 hubo un incremento del 281 % de casos de infección invasiva provocada por Streptococcus Pyogenes, en relación al mismo período de 2019. Entre varias provincias, sumaron 17 los fallecidos hasta el momento.
En declaraciones públicas a una radio bonaerense, la ministra de Salud de la cartera nacional, Carla Vizzotti, reconoció el aumento de casos, los enmarcó en un panorama de ascenso a nivel global e indicó que “no hay ninguna alarma, ninguna situación que muestre que la bacteria sea distinta”.
Para despejar dudas al respecto, este medio consultó al pediatra Martín Sapag, también miembro de la Fundación Salud para Todos. El médico explicó que la “faringitis aguda es una inflamación de la parte posterior de las fauces y la causa más común es la infecciosa, sobre todo en invierno y primavera”.
¿Qué produce faringitis?
“La producen virus y bacterias pero la causa bacteriana más común la provoca el Streptococcus pyogenes, que produce placas de pus color blanco en las amígdalas, entonces es fácil reconocerla por eso. Se acompaña de dolor de garganta al tragar, fiebre y malestar general”.
“Los médicos lo que hacemos es tratar de diferenciar cuando viene un paciente con esos síntomas, las causas virales de las bacterianas, porque las virales no se tratan con antibióticos y es importante diferenciarlas porque si se tratan con antibióticos todas las faringitis, lo que vamos a lograr es que los gérmenes se vayan haciendo resistentes”.
¿Qué síntomas se presentan con una faringitis?
“Si hay ganglios grandes, manchas rojas en el paladar, si en las fauces hay placas blancas, eso nos hace pensar en un origen bacterial. Cuando clínicamente vemos todo eso, damos antibióticos. Pero a veces puede haber dudas y en ese caso tenemos un recurso: es un hisopado de las amígdalas, es un test rápido que nos dice si el Streptococcus está presente o no. Eso es muy bueno, porque si da positivo, podemos dar antibiótico aunque no estén todos los síntomas presentes”.
Sapag agregó que es de suma importancia “hacer el tratamiento completo, por dos razones: porque se corre el riesgo de volver a tener la faringitis y además, pueden aparecer las complicaciones post streptococcicas, que tienen un origen inmunológico, donde el cuerpo reacciona al bichito que ya se fue y producir una enfermedad muy grave que se llama fiebre reumática, que es muy poco vista en estos días, pero si hacemos malos tratamientos, puede empezar a aparecer de nuevo. Es una enfermedad que inflama las articulaciones y lastima las válvulas del corazón”.
¿Cómo la faringitis puede derivar en un caso complicado, que puede llevar incluso a la muerte?
“Hay veces que este germen además de estar en las amígdalas pasa a la sangre y produce una sepsis, es decir una infección de la sangre, que es muy grave y que puede ser mortal.
Los casos que estamos viendo tienen que ver con esa posibilidad, por eso es muy importante que si tenés una faringitis puedas ser evaluado y que el médico pueda determinar si es viral o bacteriana. El hisopado es una cosa que está muy disponible acá en la comarca y ayuda a definir”.
El médico explicó que existe un virus que produce angina con pus, y que puede confundirse con una infección bacteriana. Se trata del virus de la mononucleosis infecciosa. “Y tenemos que diferenciarlo, porque en ese caso, si damos antibióticos, después de unos días de tomarlos, los pacientes con mononucleosis se brotan en la piel”.
El facultativo reconoció que hay un aumento de casos, “pero que no llega a producir cambios en la actitud. Es decir: ante un caso compatible concurrir al médico, evitar automedicarse y seguir las indicaciones para evitar las enfermedades invasivas”.
Agregó que “todo lo que aprendimos en la pandemia y con la Influenza A, sirve: toser y estornudar en el codo; evitar ir a lugares de mucha concurrencia si estamos enfermos, usar el barbijo si hay tos y mocos, lavarse bien las manos”, para minimizar la propagación de los gérmenes.
Sapag señaló que no existe una vacuna contra el Streptococcus pyogenes y que no hay registro hasta ahora de muerte en Neuquén por esa bacteria. “Angina por Streptococcus hay un montón, ésta es la época, (los casos) aumentan ahora y a principios de la primavera, sobre todo en adolescentes”, puntualizó.