La institucionalidad de la ciudad está garantizada, tras la muerte del intendente José Rioseco ya que esta situación está prevista en la carta orgánica municipal.
El presidente del Concejo Deliberante, Jesús San Martín, será intendente interino por los próximos tres meses. El artículo 42 de la carta orgánica es el que establece los pasos a seguir en caso de muerte del intendente.
Dice allí que cuando falta un año o menos para la finalización del mandato, quedará a cargo el presidente del Concejo Deliberante. En este caso, además, ya se realizaron las elecciones para elegir a un nuevo intendente que es Ramón Rioseco, pero este no asumirá sino hasta el 10 de diciembre, según los pasos legales.
En la práctica la situación puede ser distinta, ya que tras los momentos de intenso dolor que le tocan atravesar, Ramón Rioseco será quien tome las decisiones a seguir en lo sucesivo aunque formalmente será Jesús San Martín quien deba firmar los documentos.
También deberá asumir un nuevo concejal por estos tres meses, para completar el bloque del oficialismo en el Concejo Deliberante.
“En caso de acefalía por muerte, destitución, incapacidad permanente sobreviniente o renuncia del intendente, el cargo será desempeñado por el presidente del Concejo Deliberante o, en su defecto, por quien suceda al mismo, quien deberá convocar a
Texto del artículo 42 de la carta orgánica municipal
elecciones para dicho cargo dentro de los diez (10) días de asumida la función ejecutiva, la que se realizará en un período no mayor a los noventa (90) días corridos, salvo que faltare un (1) año o menos para la finalización del mandato, en cuyo caso continuará hasta finalizar el mismo”