La sala de juegos ubicada en esta ciudad, y que junto a otras tres ubicadas en otras localidades de la provincia , estuvo cerrada preventivamente en los últimos seis días, abrió otra vez sus puertas, pero bajo un fuerte condicionamiento: su dueño debía presentar hoy una propuesta señalando cuántos días necesita para pagar en forma total los más de 200 millones que le debe al Instituto Provincial de Juegos de Azar de Neuquén (IJAN).
Esta situación fue explicada por el presidente del organismo, Raúl Bettiga a este medio. La propietaria del casino ubicado a metros de la rotonda de Plaza Huincul, y que cuenta también con un hotel y restaurant, es Coleal S.A., del empresario Fabio Torres. La firma tiene otras tres salas en Piedra del Águila, Las Lajas y Loncopué.
Bettiga indicó que Coleal S.A incumple con el pago del canon desde abril de 2023, cuando hizo una entrega parcial. “De ahí en adelante, es todo deuda, supera los 200 millones de pesos. Desde el momento en que un apostador juega, está entrando dinero en la sala de juegos. El 17,5 por ciento de ese monto debe ser separado para el IJAN, es decir, para el estado, porque así lo dice la concesión”.
De las salas de la firma, la de Plaza Huincul es la más grande, con 90 empleados. Entre las otras tres, reúne 20 más. El funcionario señaló que la preservación de la concesión para explotar estos casinos, donde hay máquinas tragamonedas y ruletas, depende exclusivamente del pago total de la deuda.
“Nos vimos obligados a hacer una suspensión preventiva de 6 días, que ayer venció. El dueño hoy debía presentar por escrito la propuesta de pago. Solicitó un plan de pago largo y le dijimos que no. Hoy debía presentar por escrito cuántos días necesita para hacer el pago total”, puntualizó Bettiga, y agregó que si no paga los más de 200 millones que adeuda, “se le quita la concesión. Ya no hay límites ni forma. Él ya está intimado desde la gestión anterior”.