En la tarde del pasado domingo, un incidente vial en el kilómetro 1333 de la ruta 22, en Cutral Co, dejó al descubierto una serie de irregularidades que han generado preocupación respecto a la seguridad vial y la aplicación de la ley.
El hecho involucró a dos vehículos: un Toyota Etios, conducido por la señora Sara, y un Peugeot 504, cuyo conductor, un hombre de 49 años, se vio envuelto en el accidente. A pesar de que no se reportaron heridos, ambos vehículos sufrieron daños materiales.
Lo más alarmante fue el resultado del test de alcoholemia realizado al conductor del Peugeot 504, que arrojó un nivel de 2,95 gramos de alcohol por litro de sangre, muy por encima del límite legal permitido
Sara, dueña del Toyota Etios, expresó su preocupación y frustración ante la conducta negligente del conductor responsable del accidente y las acciones tomadas por la policía. En una comunicación con este medio, manifestó: “A mí el seguro me lo va a pagar, pero me quedo mínimo un mes sin el auto con el que voy a trabajar”.
Sara también señaló que fue ella quien llamó a la policía tras el accidente, y que el vehículo responsable no fue secuestrado, a pesar de la falta de seguro y licencia de conducir del conductor. “No lo detuvieron. No le quitaron el carnet porque no tenía. No pasó nada. La excusa fue que no tenían grúa”, dijo indignada.
Estas declaraciones resaltan las deficiencias en la aplicación de la ley y la necesidad de tomar medidas más estrictas para prevenir este tipo de incidentes.